ROZEN, PABLO
Este Vía Crucis se aleja del formato del Vía Crucis tradicional. El contenido y la concepción catequética aquí recogidos son válidos para todo momento del año y en cualquiera de las convivencias y retiros con jóvenes. El Camino de la Cruz deja de ser algo ajeno a nosotros para convertirse en nuestro propio caminar alentado por la presencia vivificadora de Jesús. Ser cristianos implica optar por la Vida asumiendo sus compromisos y sabiendo que, aunque tengamos que cargar distintas cruces, caminamos a la Resurrección.