MADRE DOLORES DE JESÚS
MIS RECUERDOS DE LA MADRE MARAVILLAS
La Madre Dolores de Jesu´s fue siempre la sombra luminosa de santa Maravillas. Nadie conocio´ a la Santa mejor que la que vivio´ a su lado durante cuatro de´cadas, acompan~a´ndola en viajes y fundaciones. Fue su ma´s directa colaboradora y la hija ma´s querida. La acompan~o´ en todas sus fundaciones, si exceptuamos las dos primeras. Sus consejos, su entrega para secundar los proyectos de la Santa fueron la mejor ayuda que esta encontro´ para la ingente obra material y espiritual que llevo´ a cabo.
Este libro es un testimonio de incalculable valor sobre la gran santa carmelita del siglo XX. La Madre Dolores puso por escrito lo que recordaba de las innumerables vivencias junto a ella: «Todo lo que voy a decir ?escribio´? o me lo ha contado ella misma o lo he visto con mis propios ojos, antes de ser carmelita, en que la trate´ con mucha intimidad, ma´s los treinta y nueve an~os que he vivido con ella en el convento: total, cuarenta y tres».
Dios concedio´ a la Madre Dolores una excelente memoria. Algunos sacerdotes, especialmente un padre carmelita, y nosotras mismas le insisti´amos en que teni´a que escribir todo lo que recordase relacionado con la Madre Maravillas, aunque fueran cosas que luego no declarase en el Proceso, por no tener mayor trascendencia. Asi´ lo hizo. Llevada de inmenso amor a su venerada Madre, la Madre Dolores, robando minutos de aqui´ y de alla´ a sus muchas ocupaciones, fue dictando lo que recordaba, y completa´ndolo con las innumerables preguntas que le haci´amos. Narraba los hechos y sus circunstancias con suma sencillez, pues solo le interesaba que no se perdiese en el olvido. Comprendi´a que cualquier detalle, aparentemente insignificante, de su vida, seri´a un precioso tesoro. Asi´ surgieron estos recuerdos, que ahora titulamos: Mis recuerdos de la Madre Maravillas. Son un pa´lido reflejo de su valiosísima e interesante declaracio´n en el Proceso que duro´ ciento cinco horas, repartidas en veintise´is sesiones.